El excomandante paramilitar Salvatore Mancuso Gómez fue citado a declarar ante la Corte Suprema de Justicia para que declare en la investigación que se adelanta contra el senador Fabio Raúl Amín Saleme y el excongresista William Vélez Mesa por sus presuntos vínculos y nexos con las Autodefensas Unidas de Colombia (AUC).
Los dirigentes políticos fueron señalados por la excongresista Zulema Jattin, ante la JEP, de firmar acuerdos políticos con los paramilitares para llegar al Senado.
En una audiencia reservada, Salvatore Mancuso deberá dialogar sobre los procesos contra de los dirigentes políticos.
El alto tribunal adelanta una indagación en contra del senador cordobés Fabio Raúl Amín Saleme, del Partido Liberal, y del exrepresentante a la Cámara por Antioquia William Vélez Mesa, del Movimiento Renovador de Acción Social, el grupo de Mario Uribe Escobar, primo del expresidente Álvaro Uribe.
Esta investigación inició luego de la compulsa de copias que hizo la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP) sobre las declaraciones que entregó la excongresista Zulema del Carmen Jattin Corrales, procesada por el delito de concierto para delinquir agravado y acusada por sostener vínculos con las AUC.
La exsenadora del Partido de la U Zulema Jattin Corrales, “prendió el ventilador” en la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP) sobre su relación con el paramilitarismo, en Córdoba y salpicó a alcaldes, gobernadores e importantes figuras políticas, entre ellas el expresidente Álvaro Uribe. Sus declaraciones fueron estudiadas por esa jurisdicción, quien las calificó de interés para el Caso 08 que investiga los crímenes de la fuerza pública cometidos con grupos paramilitares y confirmó no solo su sometimiento, sino la libertad que le otorgó en octubre de 2022.
La JEP avaló el sometimiento de la excongresista, quien adquirió compromisos como aportar a la verdad sobre los vínculos de los paramilitares con la clase política en Córdoba. Fue entonces que Corrales mencionó el nombre del senador Fabio Raúl Amín, razón por la cual la Corte Suprema de Justicia abrió la investigación contra el congresista.
Y también en sus declaraciones, Jattin Corrales salpicó al expresidente Álvaro Uribe, dijo que lo visitó en 2002, cuando era congresista, para denunciarle que, según ella, estaba preocupada porque los paramilitares en Córdoba estaban prohibiendo candidatos y este no le prestó demasiada atención.
“Simplemente orientó la conversación a que, si yo no tenía una prueba diferente a mi testimonio o a los testimonios de mi hermano o de William Salleg, que no iba a corroborar nada, pues era preferible que no pusiera la denuncia. Y eso era más que una advertencia, digamos, era una sugerencia respetuosa, pero a la que yo en ese momento iba a hacer total el caso”, dijo la exsenadora.
En este sentido, la exsenadora dijo que cree que Uribe le dijo esto por sus posibles intereses políticos: “Yo le hablé a él, específicamente de la doctora Eleonora Pineda y del doctor Miguel de la Espriella (…) creo que a él le interesaba que ellos lo acompañarán, le interesaba que todo ese andamiaje político, ya que lo estaba acompañando en Córdoba, se mantuviera y si yo me ponía a hacer ruido o a denunciarlo (…) Pues ese ruido iba a afectar la campaña presidencial”.
Esas declaraciones que entregó ante la Justicia Especial fueron muy sonadas y el expresidente Álvaro Uribe Vélez, posteriormente la denunció por sus palabras.
También dentro de sus declaraciones, Jattin Corrales admitió haberse aliado con los paramilitares de Salvatore Mancuso en conjunto con otros congresistas como Julio Manzur, en el llamado Pacto de Sindicato a la Gobernación de Córdoba:
“El aspecto novedoso es reconocer que sabíamos la solicitud de Salvatore Mancuso, eso no lo hemos reconocido ni yo, ni ninguno de quienes estamos acompañando la candidatura de Juan Carlos Aldana en la jurisdicción ordinaria, que lo sabíamos, que no lo denunciamos, que yo omití denunciar, que no lo puse en conocimiento de las autoridades y que hubo un pacto no escrito, pero tácito, con la autodefensa para entregarle las secretarías, si ganaba el candidato del llamado sindicato por los medios de comunicación”, dijo la exsenadora.
Mancuso se encuentra privado de su libertad den la cárcel La Picota, de Bogotá, desde el pasado 27 de mayo, cuando regresó a Colombia tras cumplir una condena de 17 años por delitos relacionados con el narcotráfico. En la actualidad la Corte Constitucional evalúa el conflicto de competencias presentado para evaluar su libertad.
El exjefe paramilitar fue citado por la Sala de Instrucción del alto tribunal para el próximo viernes, 19 de abril de 2024.
La Corte busca definir si el senador Fabio Amín y el excongresista William Vélez sostuvieron nexos con el paramilitarismo en la Costa Caribe.
