La diligencia se llevó a cabo en el barrio Alto de Capry de Florencia donde las autoridades se desplazaron para verificar información de fuente humana que daba cuenta sobre un estanquillo que distribuía licor de contrabando.
Es así como que en el establecimiento comercial se realizó la respectiva diligencia de allanamiento y registro donde según el peritaje del Grupo Anticontrabando de la Gobernación de Caquetá, el licor encontrado estaba envasado en botellas que presentaban irregularidades en la tapa, estampilla y etiqueta, las cuales se encontraban sueltas o borrosas.
De igual manera se hallaron cajas vacías para empaque de aguardiente y de ron. Además, galones y un timbo donde al parecer almacenaban el licor para después reenvasarlo en las botellas, 105 estampillas sueltas y hojas de impresiones de estampillas con serial borroso.
Las 560 botellas de aguardiente, whisky y ron de las cuales se presume su procedencia no es lícita, fueron incautadas en un trabajo coordinando de la Fiscalía General de la Nación a través de investigadores del CTI de la Seccional Caquetá en coordinación con funcionarios del Grupo Operativo Anticontrabando de la Gobernación de Caquetá.
La Fiscalía imputó cargos por los delitos de ejercicio ilícito de la actividad monopolística de arbitrario rentístico; usurpación de derechos de propiedad industrial y derechos de obtentores de variedad vegetales, y circulación y uso de efecto oficial o sello falsificado a la mujer que se encontraba en el sitio, quien deberá seguir respondiendo mientras avanza la investigación.
