Este es un invento de la doctora Lucy Zaborowska, residenciada en Cardiff, Gales, quien ha desarrollado una innovadora calculadora que revela la cantidad de CO2 que se libera a la atmósfera cada año por el consumo diario de café, un hábito muy común de las personas.
“Coffee Footprint Calculator”, es el nombre que le dieron a la calculadora, la cual puede ser usada en la plataforma web Omni, donde permite ingresar cuántas tazas de diferentes tipos de café toman a la semana los usuarios, arrojando el resultado de cuánto dióxido de carbono liberan por la rutina.
Entre los tipos de cafés que aparecen están el expreso, el americano, latte, cappuccino, entre otros. La calculadora también analiza el impacto de los métodos de cultivo, la producción de leche e incluso los vasos de papel utilizados para servir la bebida al calcular su impacto en el medio ambiente. La motivación de la inventora de este nueva herramienta la doctora Zaborowska, fue su gran gusto y diario consumo de café.
La investigadora descubrió que los 10 cafés con leche a la semana que toma equivalen a 125,2 kg de CO2 por año, lo que significa que se necesitaron 72.800 litros de agua para complacer su gusto por el café. Según sus propios registros, creó la calculadora para que pueda dar consejos sobre cómo beber café de forma más sostenible, como por ejemplo en tazas reutilizables.
La Coffee Footprint Calculator se centra solo en el consumo de café con leche de vaca, ya que la doctora Zaborowska quería que fuera más simple enviar un mensaje concientización.
“Comprender cómo mi hábito diario de tomar café afecta el medio ambiente es un paso hacia la adopción de opciones más sostenibles”, declaró Lucy Zaborowska, quien creó la herramienta con el científico Komal Rafay, otro amante del café.
La especialista aseguró que beber café con tipos de leches alternativas hace una “diferencia significativa” en términos de números. “Creo que educar a otros sobre el mayor culpable, la leche de vaca, ya es importante, ya que reduce su huella a la mitad cuando se cambia a la leche de origen vegetal”, explica la doctora.
La herramienta “calcula su huella de carbono en función de la cantidad y el tipo de café que consume y le ofrece sugerencias personalizadas para beber de forma más sostenible”, en palabras de Zaborowska.
El resultado es un resumen del consumo de cafeína, la cantidad de agua utilizada para producir la cantidad requerida de café y la cantidad de personas que beben esta cantidad de agua que requiere su consumo de café.
También revela la cantidad de dióxido de carbono equivalente producido, el número de árboles necesarios para absorber la cantidad de dióxido de carbono que se emite y a cuánto equivale este CO2 en términos de diferentes actividades consumidoras de energía.
“Los amantes del café como yo tendrían que tomar decisiones más ecológicas para seguir viviendo en este planeta y disfrutar del café también”, concluyó Zaborowska.
Fuente: Fayerwayer.
