Por Lola Portela
La senadora y precandidata presidencial María Fernanda Cabal se comprometió públicamente a reducir el precio de los combustibles en Colombia con una propuesta clara que busca aliviar el bolsillo de los colombianos. Su plan incluye eliminar impuestos innecesarios, reformar el sistema que regula los precios, abrir el mercado para que haya más competencia y cortar el despilfarro del Estado.
Y desde ese contexto Cabal tiene claro que se necesario mitigar el impacto de los combustibles en la inflación y el costo del transporte. Su iniciativa parte de la necesidad de hacer más eficiente al Estado y abrir el mercado energético a nuevas opciones.
“Los combustibles no pueden seguir siendo un lujo. Vamos a bajar su precio con una reforma seria y pensada para la gente”, aseguró Cabal en su mensaje a los colombianos.

¿Qué propone exactamente?
- Menos impuestos a la gasolina: Hoy la gasolina está cargada de impuestos como el IVA, la sobretasa y el impuesto al carbono. Cabal propone revisarlos y bajarlos progresivamente para que el costo final no castigue al ciudadano común.
- Reforma al Fondo de Estabilización de Precios (FEPC): Este fondo, que supuestamente evita alzas bruscas en los precios, está generando un hueco financiero gigante que terminan pagando los ciudadanos. “No más errores del Estado que se pagan con el sudor de la gente”, dijo.
- Más competencia, menos monopolio: Hoy Ecopetrol y Reficar dominan el mercado. La propuesta es abrir el sector a nuevos actores, para que podamos importar gasolina más barata y tener más opciones.
- Recortar el derroche del gobierno: Para compensar la reducción de impuestos, Cabal plantea cortar el gasto innecesario. “El problema no es falta de plata, es que se gasta mal. Vamos a dejar de alimentar la burocracia para invertir en lo que realmente importa”, afirmó.
¿Qué beneficios traería esto?
➡️ Menor costo de vida
➡️ Menos inflación
➡️ Más dinero en el bolsillo de las familias
➡️ Mayor competitividad para el país
Cabal concluyó con un mensaje claro: “Reducir el precio de la gasolina mejora toda la economía. Baja el precio de los alimentos, del transporte y ayuda al empleo. Es hora de tomar decisiones pensando en la gente, no en los intereses del poder”.