Por Lola Portela
MOSCÚ.– En medio del aumento de la presión de Estados Unidos para que deje el poder, el presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, recibió señales de respaldo de Rusia y Bielorrusia, mientras Colombia dejó abierta la posibilidad de darle asilo, si acepta una salida negociada.
El Kremlin informó que el presidente ruso, Vladimir Putin, mantuvo una llamada telefónica con Maduro en la que reafirmó su apoyo al gobierno venezolano frente a lo que calificó como “creciente presión externa”. Según la presidencia rusa, ambos mandatarios ratificaron su compromiso de avanzar en proyectos conjuntos, especialmente en los ámbitos económico, energético y comercial, y destacaron el carácter “estratégico” de la relación bilateral.
Putin subrayó además que el pueblo venezolano “merece absoluto respeto” en la defensa de su soberanía e independencia y aseguró que Rusia seguirá apoyando a Venezuela, incluso ofreciendo su capacidad diplomática para fortalecer la cooperación.
En paralelo, Bielorrusia dio nuevas señales de cercanía. El presidente bielorruso, Alexander Lukashenko, se reunió por segunda vez en 17 días con Jesús Rafael Salazar Velázquez, embajador de Venezuela en Moscú. Según la agencia estatal Belta, Lukashenko le reiteró que Maduro “siempre será bienvenido” en Bielorrusia y señaló que sería un buen momento para que visite Minsk.
Durante el encuentro, Lukashenko recordó que habían acordado “coordinar ciertos asuntos” y no descartó involucrar directamente a Maduro si fuera necesario. Aunque la agencia Reuters pidió aclaraciones sobre si Bielorrusia estaría dispuesta a ofrecerle refugio en caso de que deje el poder, la oficina presidencial bielorrusa no respondió.
Mientras tanto, Colombia también se sumó a las opciones de salida. La canciller colombiana, Rosa Villavicencio, afirmó que su país no descarta otorgar asilo a Maduro si acuerda abandonar el poder en el marco de una negociación con Estados Unidos. “Si esa salida implica que él deba vivir en otro país o pedir protección, Colombia no tendría por qué decirle que no”, dijo en una entrevista radial. No obstante, aclaró que esa decisión depende de un acuerdo entre Washington y el gobierno venezolano, y consideró que Maduro podría preferir un destino “más distante y más tranquilo”.
Y es que cabe anotar que, según expertos analistas, Nicolás Maduro no tendría ninguna seguridad en Colombia, dado que “tiene ‘aliados’ que se conviertirán en enemigos, porque les habría hecho promesas que no les cumpliría, al entregarse o ser capturado”.
Según fuentes citadas por Reuters, Maduro habría dicho al presidente estadounidense Donald Trump, en una llamada del 21 de noviembre, que estaba dispuesto a dejar Venezuela si él y su familia recibían una amnistía legal completa.
El gobierno de Trump ha declarado que no reconoce a Maduro como presidente, en el poder desde 2013, pero en Joe Biden el régimen tuvo complacencia Maduro como presidente legítimo de Venezuela.
Nicolás Maduro afirmó haber ganado la reelección el año pasado en unas elecciones que Estados Unidos y otros gobiernos occidentales calificaron de farsa. Observadores independientes afirmaron que la oposición había ganado por abrumadora mayoría.
Estados Unidos fue contundente, con Donald Trump, en no reconocer a Nicolás Maduro como presidente legítimo y considera fraudulentas las elecciones en las que afirmó haber sido reelegido. En los últimos meses, Trump intensificó la presión sobre Caracas, incluso con un fuerte despliegue militar en el Caribe, y aseguró que los días de Maduro “están contados”.
Desde Moscú, la vocera de la Cancillería rusa, María Zajárova, advirtió que espera que la Casa Blanca evite un conflicto mayor que podría tener “consecuencias impredecibles” para toda la región.
En este contexto de tensiones internacionales, Maduro suma apoyos de aliados históricos, mientras crecen las versiones sobre una inminente salida del poder y un eventual exilio en el extranjero.
Por ahora, María Corina Machachado y Edmundo González permanecen fuera de Venezuela. Y el desarrollo de esta operación ya comenzaría, convirtiéndose en las 72 horas de mayor tensión de la Operación contra el Narcoterrorismo. Se dice que el Tren de Araugua de Venezuela, y los grupos armados colombianos ELN y FARC, apoyados por el régimen de Venezuela y su Cartel de los Soles estarían buscando salida y reubicación hacía otras zonas de la región.
Y en ese contexto el grupo guerrillero colombiano ELN, prendió alertas porque anunció en Colombia, en un comunicado el 12 de diciembre, un “Paro Armado”, a partir del hoy 14 y hasta el 17 de marzo, en el cual prohiben movilidad por ríos y carreteras. Y al parecer todo estaría enlazado, con el destino final de Nicolás Maduro, la libertad de Venezuela y los operativos que, para tal fin, se darían en las siguientes 72 horas en el hemisferio; y a partir de la media noche de este 14 de diciembre.
¿Venezuela tendrá una Navidad en libertad?, es lo que consideran los analistas consultados. Mientras las horas corren.
Agencias Reuters, AFP y AP
