En Mitú, donde el verde de la selva abraza cada amanecer y el río Vaupés refleja historias que parecen no terminar nunca, la Policía Nacional volvió a reunirse para conmemorar un día que no es solo una fecha: es memoria, compromiso y vida. Este año, los uniformados del departamento celebraron los 134 años de la institución, una organización que aprendió a caminar con la patria y que hoy continúa firme, incluso en los rincones más remotos de Colombia.
Desde muy temprano, el parque principal de Mitú se llenó de voces, saludos y ese brillo especial que nace del orgullo de servir. Las banderas flameaban, el sol atravesaba las copas de los árboles y un aire solemne pero cálido acompañaba cada paso, así lo relató el subteniente Jhon Brian Peña Bermúdez de comunicaciones.
Allí, frente al personal policial, autoridades y comunidad invitada, el coronel Felipe Andrés Ardila Valderrama, comandante del Departamento de Policía Vaupés, tomó la palabra. Su mensaje, sereno y cargado de significado, quedó grabado en todos los presentes:
“Hoy honramos 134 años de historia construida con sacrificio, vocación y amor por Colombia. En el Vaupés, este compromiso se multiplica, porque servir aquí significa entender la diversidad, respetarla y protegerla. Cada policía que pisa este territorio es un guardián del verde, de la vida y de la esperanza.”
Las palabras del coronel Ardila Valderrama resonaron con fuerza en un territorio donde la labor policial va más allá de la seguridad: es acompañamiento, es presencia, es puente entre culturas. Conscientes de que en el Vaupés se convive con más de treinta pueblos indígenas, los uniformados han aprendido que su trabajo es, también, un acto diario de escucha y respeto.
Durante el acto de conmemoración, se rindió homenaje a los policías caídos, a aquellos que entregaron todo por proteger a quienes ni siquiera llegaron a conocer. Un minuto de silencio cubrió el espacio como un manto de memoria. Luego, los reconocimientos al personal destacado recordaron que aún en medio de la selva, el sacrificio y el esfuerzo no pasan desapercibidos.
La ceremonia cerró con un mensaje que muchos llevarán grabado para siempre:
“La convicción de que servir en el Vaupés no es solo un deber, sino un honor”
La Policía Nacional en este rincón del país continúa escribiendo su historia con pasos firmes, corazón humilde y una certeza que el coronel Ardila Valderrama expresó con claridad:
“Seguiremos adelante, porque Colombia nos necesita. Y en el Vaupés, nuestra misión es tan grande como la selva que nos rodea.”
Así, en medio del verde infinito, la institución celebró sus 134 años reafirmando lo que ha sido desde el principio: un bastión de compromiso, servicio y patria.
