Por Lola Portela
Un menor de 17 años, que se había entregado voluntariamente el pasado 25 de julio por su presunta participación en el atentado contra el senador Miguel Uribe Turbay, abandonó en las últimas horas un centro de atención del Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (ICBF) en Bogotá. La situación generó preocupación en sectores judiciales y políticos, ya que el joven es considerado pieza clave en el proceso investigativo.
La Procuraduría General de la Nación alertó sobre una posible fuga y exigió explicaciones al ICBF, entidad encargada de su custodia. En un comunicado oficial, el ente de control anunció el inicio de indagaciones para establecer responsabilidades y urgió a las autoridades a dar con el paradero del menor.
Sin embargo, Astrid Cáceres, directora del ICBF, aclaró a través de su cuenta en X (antes Twitter) que el joven no está judicializado ni privado de libertad. Según indicó, se encontraba bajo medida de restablecimiento de derechos por su condición de migrante no acompañado y no existía ninguna restricción legal para su movilidad. “No hay evasión”, afirmó Cáceres.
El menor había declarado que participó en una reunión previa al atentado ocurrido el 7 de junio en el barrio Modelia de Bogotá, durante un evento político. Según su testimonio, en ese encuentro se definió la logística del ataque y se identificó como presunto coordinador a Elder José Arteaga Hernández, alias El Costeño, actualmente detenido en el búnker de la Fiscalía.
Estaba previsto que esta semana el joven rindiera una segunda declaración para ampliar información sobre los autores intelectuales del atentado. Su ausencia representa un duro golpe para la Fiscalía, que considera su testimonio crucial en la reconstrucción del caso.
Avances en la investigación
Hasta el momento, seis personas han sido judicializadas por su participación en el atentado, entre ellos alias El Costeño, imputado por tentativa de homicidio, concierto para delinquir, uso de menores para cometer delitos y porte ilegal de armas. Aunque no aceptó los cargos, permanece detenido.
Otro de los implicados es un menor de 15 años, acusado de ser el autor material de los disparos contra Uribe Turbay. Fue capturado en flagrancia mientras huía, herido. La Fiscalía lo presentará formalmente ante la justicia el próximo 4 de agosto.
También está involucrada Katerine Andrea Martínez, alias Gabriela, presunta pareja de El Costeño, señalada de entregar el arma al sicario y de apoyar la logística del crimen. Es procesada por tentativa de homicidio agravado, porte ilegal de armas y uso de menores.
Carlos Eduardo Mora González habría hecho un reconocimiento previo del lugar del atentado y acompañó al menor sicario en el vehículo donde recibió el arma. Por su parte, William Fernando González Cruz, alias El Hermano o El Viejo, está acusado de reclutar al joven atacante y facilitar la huida de los responsables, mientras Cristian Camilo González Ardila habría coordinado la fuga tras el atentado.
En búsqueda urgente
Las autoridades aún no han determinado cómo se produjo la desaparición del menor de 17 años ni tienen pistas concretas sobre su paradero. La búsqueda continúa con carácter prioritario, en un esfuerzo por garantizar el avance del proceso judicial que busca esclarecer los hechos y llevar a los responsables ante la justicia.
