Por Lola Portela
Las alarmas se encendieron en todo el país, especialmente en Jerusalén y Tel Aviv. Lo de hoy representa la mayor escalada del conflicto desde el pasado 7 de octubre.
“Se han lanzado misiles desde Irán hacia Israel y las sirenas suenan en todo el país”, informó el ejército israelí en un comunicado.
El martes 1 de octubre, antes del ataque, la Casa Blanca advirtió que Irán estaba dispuesto a lanzar un ataque con misiles balísticos contra Israel, lo que aumentó instantáneamente los temores de una guerra total en la región.
“Estados Unidos tiene indicios de que Irán se prepara para lanzar de forma inminente un ataque con misiles balísticos contra Israel. Estamos apoyando activamente los preparativos defensivos para defender a Israel contra este ataque. Un ataque militar directo de Irán contra Israel acarreará graves consecuencias para Irán”, declaró un alto funcionario de la Casa Blanca en un comunicado.
Israel evaluó que era probable que Irán atacara tres bases aéreas israelíes y una base de inteligencia ubicada al norte de Tel Aviv, dijo una persona informada sobre el asunto.
La base de inteligencia en Glilot fue evacuada el martes por la tarde, indicó la persona, y el ejército israelí puso en marcha planes de contingencia para la seguridad del personal en esas bases.
Las tensiones entre Israel e Irán aumentaron significativamente en las últimas semanas a medida que Israel intensificó sus esfuerzos contra Hezbollah, un grupo militante respaldado por Irán, e Israel lanzó el lunes una operación terrestre en el sur del Líbano.
Estados Unidos advirtió a Israel con antelación que probablemente se produciría un ataque en las próximas 12 horas, poco después de la advertencia de la Casa Blanca se desarrolló una reunión intensa diplomática, tras bastidores.
El presidente de EE.UU. Joe Biden convocó una reunión con la vicepresidenta Kamala Harris y altos funcionarios de seguridad nacional el martes “para discutir los planes iraníes de lanzar inminentemente un importante ataque con misiles balísticos contra Israel”, según la portavoz de la Casa Blanca, Emilie Simons.
“Revisaron el estado de los preparativos estadounidenses para ayudar a Israel a defenderse de los ataques y proteger al personal estadounidense”, agregó Simons.
Después de un año de tensiones acentuadas entre Israel y los aliados de Irán en la región (como Hamas en Gaza, Hezbollah en el Líbano y los hutíes en Yemen), un ataque de Irán contra Israel podría inclinar aún más la región hacia un conflicto a gran escala.
Los diplomáticos estadounidenses y árabes ya están preocupados por lo que podría suceder después del ataque de Irán, incluida la escala de la respuesta de Israel. Una de las principales preocupaciones que tienen en mente es que Israel posiblemente responderá atacando dentro de Irán.
“No hay ningún lugar en Irán al que el largo brazo de Israel no pueda llegar, y eso es cierto en todo Medio Oriente”, dijo el primer ministro israelí Benjamin Netanyahu durante su discurso en las Naciones Unidas, la semana pasada.
Estados Unidos está preparado para hacer todo lo posible para ayudar a Israel a interceptar cualquier cosa que Irán le dirija, de manera similar a cómo Estados Unidos ofreció su ayuda en abril, cuando Irán lanzó una ola de drones y misiles hacia Israel, la gran mayoría de los cuales fueron interceptados con éxito, dijo un funcionario estadounidense.
Estados Unidos anticipó que el ataque de Irán contra Israel podría ser similar en alcance y escala al de abril. Sin embargo, fue más fuerte. Y, hasta ahora, no se conoce la destrucción causada. Se habla de un palestino víctima.
Tzahal: “Habrá una respuesta severa”, “Lo que Irán ha enfrentado hasta ahora es sólo una fracción de lo que enfrentará ahora”.
– “Israel tiene ahora toda la legitimidad para asestar un ataque sin precedentes sobre suelo iraní; ahora es el momento de cortar la cabeza de la serpiente iraní”, afirmó.
Con ello queda claro que el nivel de la tensión en la región y el resto de países aumentó.