Por Lola Portela
Pensar con el deseo, no es suficiente, frente a la tiranía de un régimen que ha usado todo tipo de artimañas para perpetuarse “en poder de Venezuela” desde el 2 de febrero de 1999, a través de los gobiernos del propio Hugo Chávez desde 1999, hasta su muerte 2013, y posteriormente con Nicolás Maduro, desde 2013, a la fecha.
Por eso, no es secreto que la oposición venezolana enfrentará, el próximo 28 de julio, un desafío monumental en las elecciones presidenciales: movilizar a un electorado que fue desmotivado, durante años, por persecución, amenazas, humillaciones, detenciones arbitrarias, divisiones internas y luchas violentas que dejaron decenas de muertos y heridos. Todo ello, con el fin de derrotar con votos a la dictadura chavista que hoy encabeza Nicolás Maduro.
Y a opinión de los expertos consultados esta vez la tarea luce factualmente posible.

En hoy Venezuela surge la esperanza de libertad. Aunque la violencia de Nicolás Maduro se extiende hasta exterior. Y a pesar que extrañamente la prensa no le dio mayor divulgación, Prensa Llanera supo que recientemente el presidente Javier Milei, en su desafío al comunismo, y su sostenido mensaje de libertad, le otorgó asilo político en Argentina a la viuda y al hijo de Ronald Ojeda, el militar venezolano asesinado, en Chile, por servicios de inteligencia de la dictadura de Nicolás Maduro.

Cabe recordar que Ronald Ojeda, tenía 32 años, cuando fue secuestrado en la madrugada del 21 de febrero cuando estaba en su apartamento, con su esposa e hijo, en el piso 14, en el municipio de Independencia, en el sector centro norte de Santiago, por un grupo de hombres con las caras tapadas y vestidos con uniformes falsos de la Policía de Investigaciones (PDI) chilena.
Y el caso toma vigencia porque la policía de Costa Rica detuvo, este viernes 12 de julio, al venezolano Maickel David Villegas Rodríguez, de 27 años, sospechoso del secuestro y homicidio del exmilitar y opositor al Gobierno de Nicolás Maduro, Ronald Ojeda Moreno, quien vivía en Chile como refugiado político, y cuyo cuerpo fue encontrado en marzo, enterrado bajo cemento en un asentamiento precario en Maipú, al surponiente de Santiago.

Horas antes, el Ministerio de Relaciones Exteriores de Chile se puso en contacto con la Fiscalía, Interpol y el Poder Judicial de Costa Rica, para iniciar petición de extradición de Maickel David Villegas Rodríguez, al país austral, pero no será llevado a Venezuela, al menos por ahora.
Y es que, en abril, las investigaciones precisaron que el crimen de Ronald Ojeda se organizó desde Caracas y que el único móvil posible que queda, por su perfil, es político. Las indagaciones también apuntaron a que tras la ejecución del secuestro y homicidio está el Tren de Aragua, una banda que surgió en Venezuela, con el apoyo de Nicolás Maduro, y que opera en varias regiones de Chile desde 2022.

Por todo lo anterior, no son fáciles las elecciones próximas en Venezuela, hay mucho en juego. Aunque hasta ahora todos los estudios de opinión revelan las amplias posibilidades con las que cuenta el candidato de la oposición, Edmundo González Urrutia, sobre el oficialista Nicolás Maduro.

Y ese optimismo; la esperanza que renace y sienten los venezolanos es resultado de más de dos décadas de decadencia socialista que sumieron a Venezuela en una crisis interna en todos sus ámbitos, siendo la economía, la pobreza, y los altos niveles de violencia la punta del iceberg.
El chavismo, los seguidores de Maduro, saben que los números están en su contra, por eso no ha dudado desde el inicio del proceso en implementar todas sus trabas y estrategias conocidas para entorpecer el sano desarrollo de la elección.
De esa manera su mayor logro, hasta ahora, fue sacar de la carrera electoral, pero no de la carrera política, a la líder de la oposición, María Corina Machado, quien debió delegar su candidatura en Edmundo González Urrutia tras la inhabilitación impuesta por el régimen.

Sin embargo, el régimen de Nicolás Maduro sigue atacando a quienes le brindan apoyo a María Corina Machado y al candidato Edmundo González Urrutia.
Por esta razón, el exparlamentario Walter Márquez denunció y alertó al país y a la comunidad internacional que este jueves 11 de julio fue allanada la vivienda donde se alojó María Corina Machado, líder de la oposición, durante su gira política el 27 y 28 de junio pasado al estado Táchira.
El bloque de la oposición mayoritaria en Venezuela denunció que continúan las detenciones contra algunos de sus simpatizantes. Y confirman que el caso más reciente es el del empresario Ricardo Albacete, a quien resulta que ahora la Fiscalía General lo vincula con presuntos planes de sabotaje contra el sistema eléctrico del país, algo que su abogado rechazó y calificó el arresto como “un atropello absoluto”.

Por la corrupción descarada y las artimañas del régimen Maduro algunos expertos creen que “es muy poco probable que haya elecciones el 28 de julio en Venezuela”.
Y, en ese contexto, aclaran que son muchas las acciones que podría tomar el oficialismo para reducir la participación ciudadana o romper la unidad de los opositores y entre ellas destacan “la inhabilitación de Edmundo González Urrutia como candidato o la eliminación de las tarjetas que lo apoyan.

Internacionalmente, se sabe que María Corina Machado y el candidato Edmundo González Urrutia han tenido que sortear muchos obstáculos, entre ellos: bloqueos, persecución y ataques directos o a sus seguidores, al punto que el régimen ha cerrado locales y vías, además de llevar presos a quienes le brindan algún apoyo a la caravana de María Corina Machado y Edmundo Gonzáles, quienes para llegar a los diferentes lugares de encuentro con el pueblo venezolano, usan todo su esfuerzo físico, además de motos, canoas o relevos en carros, para lograr abrazar a los miles de venezolanos que masivamente los esperan, a lo largo y ancho de Venezuela.

Algo que para el régimen de Maduro es vergüenza internacional y muestra de lo agotada que está la Venezuela actual, con ese régimen que los tiene devastados y al borde de una enorme protesta nacional, si Maduro llegara a no permitir las elecciones o a no reconocer la victoria del partido opositor mayoritario.

Y es que, además, los millones de venezolanos que emigran de país en país, buscando oportunidades negadas en su propia patria, también tuvieron muchos impedimentos para inscribirse en los consulados o embajadas para poder votar. El régimen les impuso exigencias absurdas de cumplir, una de ellas el pasaporte, cuando se sabe que sacar ese documento es un imposible para la mayoría de venezolanos. Y, por eso, se cree que será muy reducido el voto desde el extranjero.

A pocos días de las elecciones en Venezuela la comunidad internacional, tiene fijos los ojos en Venezuela. Y en lo que pueda ocurrir si Nicolás Maduro y Diosdado Cabello Rondón atentan, esta vez, contra las elecciones. El pueblo ya demuestra su deseo de cambio.

La pregunta es ¿están contados los días, como presidente de Venezuela, de Nicolás Maduro Moros?
¿Y dónde se esconderán Maduro, Diosdado Cabello y los oficiales que los apoyaron en la destrucción de Venezuela?