Por Lola Portela
La JEP continua con la Audiencia de Observaciones de Víctimas a Versiones de Comparecientes del antiguo Bloque Oriental de las extintas Farc-EP.
Esta es la jornada No. 14 de la Audiencia de Observaciones de Víctimas del Bloque Oriental que desarrolla la JEP.
Y, hoy 6 de junio, se conocieron relatos de secuestros relacionados con desapariciones forzadas y tomas de las extintas Farc-EP, violencia sexual y tortura, entre otros delitos que se cometieron en departamentos como Meta.
Esta Audiencia de Observaciones de Víctimas a Versiones de Comparecientes del antiguo Bloque Oriental de las extintas Farc-EP, dentro del proceso que se adelanta en el Caso 01, mediante la cual se investigan los secuestros y los delitos concurrentes cometidos por la entonces organización durante el conflicto armado.
Y, luego de instalar la diligencia, el magistrado auxiliar Felipe Galvis le dio la palabra a la primera víctima de la jornada.
Así tomó la palabra Alan Jara, exgobernador de Meta, quien fue secuestrado el 15 de julio de 2001 por el frente 26 del antiguo Bloque Oriental; fue la primera víctima en intervenir en esta jornada. Jara se refirió a las afectaciones que sufrió su familia durante los siete años de su cautiverio, habló sobre el impacto que esto tuvo en su trabajo político, resaltó su apoyo al proceso de paz, y propuso un proyecto de restauración a las víctimas por secuestro:
“En primer lugar quiero reiterar mi posición de apoyo al proceso de paz que se suscribió entre las extintas Farc-EP y el gobierno nacional, bajo la premisa de la centralidad de las víctimas, acogiendo el concepto de justicia transicional”.
“En cuanto a mi secuestro quisiera saber si hay excombatientes de los distintos frentes del Bloque Oriental que pudieran dar luces sobre la pregunta que he reiterado, acerca de si hubo determinadores distintos a las Farc EP que hubieran intervenido en la decisión de secuestrarme”.
Rubiela Figueredo Piñeros, hermana del patrullero de la Policía Fredy Figueredo, fue la segunda víctima en intervenir.
Su hermano desapareció desde la toma de Mitú, en Vaupés, el 1º de noviembre de 1998, y durante la audiencia, Rubiela realizó un acto simbólico de despedida.
“Casi se cumplen 26 años de su desaparición y no hemos tenido claridad de lo que pasó en esa toma del Mitú… Yo quisiera despedir a mi hermano, no es fácil aceptar que ya no está, pero sí quisiera hacerlo como un acto de amor y un acto de soltarlo, de dejarlo ir. Quisiera prender esta velita en honor a él y todas las víctimas de este absurdo conflicto y aprovechar para darle gracias a todos, a la JEP, porque ha sido la única institución que nos reconoció”.
El magistrado auxiliar Felipe Galvis exaltó a Rubiela Figueredo por encender la vela y afirmó que “Para la Jurisdicción no hay relato que no nos invite a una profunda reflexión sobre lo que somos. Como Estado le pido disculpas, porque esto lo hemos visto en este caso, pero también en otras tomas que hemos escuchado en este espacio… Tomas de como las de Mitú o Las Delicias… Muchos lugares a donde llegaban los miembros de las extintas Farc-EP a atacar a quienes prestaban un servicio. Y es triste el nivel de desprotección en el que se encontraban para cumplir con sus tareas”.