Inicio NACIONAL Crece la lista de salpicados e involucrados, por corrupción en la UNGRD

Crece la lista de salpicados e involucrados, por corrupción en la UNGRD

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Por Lola Portela

No termina la controversia, ni la polvareda política en Colombia. Y se destapan nuevos nombres, tras la entrevista del exdirector de la Unidad Nacional de Gestión del Riesgo de Desastres (Ungrd), Olmedo López, quien ratificó que supuestamente hubo coimas, para ser utilizadas en el trámite de las reformas del Gobierno de Gustavo Petro, con dineros arañados del contrato de los carrotanques, para La Guajira.

Los nombres mencionados por Sneyder Pinilla y Olmedo López eran claros: Iván Name, presidente del Senado, Andrés Calle, presidente de la Cámara, y Sandra Ortiz, ex alta consejera para las Regiones.

Y ahora resulta que Olmedo López dijo que el ministro del Interior, Luis Fernando Velasco, “tiene que contarle muchas cosas al país”; agregó que él dio instrucciones que el exdirector solo cumplió y se refirió también de manera explícita al actual presidente de la Comisión de Acusaciones de la Cámara, Wadith Manzur.

El exfuncionario salpicó no solo al ministro del Interior, Luis Fernando Velasco, sino también al presidente de la Comisión de Acusación, Wadith Manzur. Y afirmó tener pruebas.

“El doctor Velasco le contará al país cuáles fueron los motivos de una agenda que se adelantaba y de la que soy testigo, transmitía las instrucciones que recibía a uno de mis subalternos. Es una agenda de la que tenemos que arrepentirnos y pedirle perdón al país (…) Esa agenda, precisamente, son hechos de corrupción que beneficiaron a un número importante de congresistas”, manifestó el exdirector, en la entrevista que le dio a Semana.

“En lo que tengo por las reuniones a las que asistí, el doctor Luis Fernando Velasco tendrá mucho que explicarle al país. Es precisamente en esta agenda que el país conozca la verdad. El doctor Velasco le contará al país cuáles fueron los motivos. Transmití las instrucciones que recibía y las transmití a uno de mis subalternos”, dijo Olmedo López sobre el ministro del Interior Velasco.

El ministro Luis Fernando Velasco, por su parte, en su defensa, argumenta que López es un ladrón. Y hasta afirma que “se quiere volar” y está pidiendo inmunidad “sin aportar pruebas”. Y ratifica que nunca le dio una orden directa ni era su subalterno, al tiempo que atribuye las acusaciones a una forma de obstaculizar las reformas. “Es momento de que la Fiscalía le exija pruebas”, manifiesta.

Y con respecto al presidente de la Comisión de Acusación, Wadith Manzur, Olmedo López dijo: “Este tema de los carrotanques va más allá de los vehículos. Toca a aforados, para darte solamente un nombre, el presidente de la Comisión de Acusación, Wadith Manzur, es uno de los beneficiados de todo este proceso (…) se vendió”.

Además, en medio de la entrevista que concedió a la periodista Vicky Dávila de la revista Semana, Olmedo López se refirió también a Laura Sarabia, hoy directora del Departamento Administrativo de la Presidencia (Dapre), quien es considerada la mano derecha de Gustavo Petro.

Al preguntarle sobre si Laura Sarabia conocía o no de los presuntos hechos de corrupción y las coimas legislativas, el exdirector de Ungrd manifestó que “son temas que, en su momento, los detalles de cada una de las cosas y hechos sucedidos en el año 2023 y parte del 2024 conocerá el país”.

Olmedo López, no niega la responsabilidad de quien fuera la jefe de gabinete y, en su lugar, dejó con su respuesta un manto de duda, sobre el conocimiento de quien es considerada una de las pocas personas que le habla al oído al primer mandatario, de izquierda en Colombia.

Cabe anotar también que Laura Sarabia acudió, hace unos días, ante la Fiscalía General y radicó una denuncia para que se investigue el delito de extorsión. Según la funcionaria, desde el 5 de septiembre de 2023 se gesta una supuesta campaña de desprestigio en su contra y externos desean mancillar su reputación e imagen.

Sin embargo, debemos recordar que la imagen de Laura Sarabia se vuelve más pública y su reputación se ve afectada por los escándalos de los audios con su exjefe, el actual embajador de FAO, Armando Benedetti, y con el caso de su niñera por el robo de las tales maletas, con dinero en efectivo,  que supuestamente desaparecieron de casa de Sarabia, cuya cantidad nunca le quedó clara al país, si eran 30, 70 ó 150 millones.

A 10 meses de gobierno, cuando la imagen negativa de Petro era del 59,4 % entre los colombianos, y el país vivía una cimentada violencia entre los territorios del país, sumado ello a una profunda incertidumbre por la economía en Colombia, Gustavo Petro protagonizó su tercer remezón ministerial, en medio de uno de los mayores escándalos desde que llegó a liderar los destinos de la nación y hasta tuvo que sacar de la Casa de Nariño a dos de sus principales escuderos, Armando Benedetti y Laura Sarabia.

A esos enfrentamientos personales se sumaron a una serie de eventos que desencadenaron denuncias por presunto secuestro, abuso de poder por parte del Ejecutivo y el regreso de las mal llamadas “chuzadas”, que fue el fenómeno que azotó a Colombia en 2009, cuando agentes estatales, mediante el desaparecido Departamento Administrativo de Seguridad (Das), interceptaron a funcionarios y civiles. Ese episodio da para un novelón, pero cabe traerlo a este escenario.

Y que con respecto a la extorsión que Sarabia denuncia ser víctima, la funcionaria precisa que son mensajes de un hombre identificado como “Bryan Zapata”, quien dijo tener en su poder audios, videos, mensajes y hasta los nombres de las personas que están detrás de la supuesta campaña de desprestigio en su contra, los cuales el sujeto está dispuesto a venderle.

“Estos mensajes, que, aunque no puedo afirmar la veracidad de su contenido, fortalecen lo que se ha venido denunciando ante la Fiscalía y es la existencia de un ecosistema de difamación y de violencia política en mi contra. Los mensajes recibidos fueron enviados por quien se identifica como “Bryan Zapata”, quien dice haber trabajado en una UTL en el Congreso de la República”, se lee en la denuncia de Laura Sarabia.

Lo único cierto, en este “maremoto de escándalos”, es que Colombia tiene aún mucho por saber. Y se vislumbra que son varios los hilos entretejidos y enredados, que conllevan a una enorme corrupción y a “personajes involucrados y salpicados”, que aún no conocemos y tal vez ni imaginamos, pero la olla ya huele a podrido.