A través de un comunicado de seis puntos, la defensa de Nicolás Petro y en medio de la colaboración que adelanta el hijo del presidente con la justicia por presuntos ingresos de dineros ilícitos a la “campaña Petro Presidente”, advirtió que continúan las amenazas contra su defendido y y piden a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos – CIDH garantías para continuar el proceso.
Según indican en el primer punto de la misiva, desde que Nicolás comenzó su proceso de colaboración “iniciaron los hostigamientos, intimidaciones, acercamientos irregulares a su lugar de reclusión, mensajes públicos vía Twitter, persecuciones, amenazas y estigmatizaciones mediáticas falases de su persona y la de sus abogados”, situación que, aseguran, pone en riesgo la vida de todos los actores: “testigo, defensa, servidores judiciales”, pues los convierten en “blanco elegido de los grupos armados legales e ilegales del territorio colombiano”.
La defensa da a conocer, igualmente, que han acudido a la CIDH para informar de estos graves hechos de persecución a la defensa, servidores judiciales y al testigo por parte de individuos, como Eduardo Noriega, que no quieren la verdad para Colombia.
Incluso, señalan que Noriega, a quien señalan como representante del partido Colombia Humana: “está valiéndose de fantasías demenciales de conspiración que ponen en riesgo las vidas de los actores ya mencionados, por lo que, de paso, solicitan que se investigue cuáles son sus intereses al tratar de interferir en un proceso judicial de cara al país”.
Y finalmente, en el sexto punto del mismo comunicado, rechazaron: “los intríngulis que han elaborado para conectar el vil asesinato del candidato Ecuatoriano Villavicencio con el caso de los Petro en Colombia” y rechazaron igualmente el magnicidio, implorando que: “ojalá, Ecuador no se convierta en el mar de sangre que somos los colombianos”.